El 7 de abril, Citi reveló su última Encuesta de Expectativas de México, en la que economistas privados proyectaron que la economía crecería un 0.3% en 2025, menos que el 0.6% esperado en la última encuesta. Para 2026, se espera que el PIB disminuya del 1.7% al 1.5%.
Para la próxima reunión del Banco de México (Banxico) en mayo, 29 analistas estiman que el banco central reducirá las tasas 50 puntos básicos (pb) al 8.50%. Tres participantes proyectan un recorte de tasas de 25 pb. Para el resto del año, se espera que la tasa de interés de México termine en 8%, y para 2026, las proyecciones medianas indican tasas del 7%.
El tipo de cambio USD/MXN para fin de año en 2025 es de 20.90, y para 2026 se proyecta que suba a 21.30, 20 centavos menos que la encuesta anterior.
Se proyecta que la inflación general de marzo termine en 3.8% interanual, superior a la tasa del 3.77% de febrero. Las cifras subyacentes se proyectan que terminen en 3.64% interanual, inferior al mes anterior de 3.65%.
Las expectativas de inflación se mantuvieron estables en 2025, con cifras generales esperadas en 3.80% para todo el año y un aumento del 3.66% al 3.7% para fin de año. Para 2026, se espera que la inflación se mantenga en 3.78%, sin cambios respecto a la encuesta anterior.
El Banco de México, también conocido como Banxico, es el banco central del país. Su misión es preservar el valor de la moneda mexicana, el Peso mexicano (MXN), y fijar la política monetaria. Para ello, su principal objetivo es mantener una inflación baja y estable dentro de los niveles objetivo –en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%.
La principal herramienta de Banxico para orientar la política monetaria es la fijación de las tasas de interés. Cuando la inflación se sitúa por encima de la meta, el banco intentará controlarla subiendo las tasas, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas y, por lo tanto, enfría la economía. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN. El diferencial de tasas con el Dólar, o la forma en que se espera que Banxico fije las tasas de interés en comparación con la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), es un factor clave.
Banxico se reúne ocho veces al año y su política monetaria está muy influenciada por las decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Por ello, el comité de toma de decisiones del banco central suele reunirse una semana después de la Fed. De esta manera, Banxico reacciona y en ocasiones se anticipa a las medidas de política monetaria fijadas por la Reserva Federal. Por ejemplo, después de la pandemia de Covid-19, antes de que la Fed subiera las tasas, Banxico lo hizo primero en un intento de disminuir las posibilidades de una depreciación sustancial del Peso mexicano (MXN) y evitar salidas de capital que pudieran desestabilizar al país.