El presidente del Banco de la Reserva Federal (Fed) de Chicago, Austan Goolsbee, señaló el miércoles que es difícil para los bancos centrales estimar en general las repercusiones de cosas como los aranceles, y podría complicar la capacidad de la Fed para cumplir su tarea de reducir la inflación al 2%.
Si la inflación sube o el progreso se estanca, el banco central de EE.UU. necesitará averiguar si es por sobrecalentamiento o por aranceles.
La inflación ha bajado y se está acercando al objetivo del 2% de la Fed.
EE.UU. tiene una economía fuerte y plausiblemente pleno empleo.
Distinguir la causa de cualquier inflación será crítico para decidir cuándo o incluso si la Fed debería actuar.
La experiencia de la pandemia de COVID-19 muestra que las interrupciones en la cadena de suministro pueden tener un impacto material en la inflación.
Ignorar las posibles consecuencias de nuevas amenazas a las cadenas de suministro, como los aranceles, sería un error.
Las opiniones difieren ampliamente sobre cuánto se trasladarían los aranceles a los precios, los proveedores podrían tener que absorber el coste.
Los aranceles esta vez podrían ser más amplios y altos que en 2018; el impacto podría ser mayor y más duradero.