El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, participará en una discusión moderada sobre las perspectivas económicas el miércoles en la Cumbre DealBook del New York Times en Nueva York. Los inversores seguirán de cerca sus comentarios, ansiosos por cualquier señal sobre la futura política monetaria.
El evento se produce en un momento en que los mercados en gran medida esperan que la Fed recorte su tasa de política en otros 25 puntos básicos durante su reunión del 17-18 de diciembre. Sin embargo, esta expectativa perdió algo de impulso tras los comentarios de Powell en un evento en Dallas el 14 de noviembre.
Durante su discurso en Dallas, Powell indicó que la Fed podría tomarse su tiempo antes de realizar más recortes de tasas. Señaló el crecimiento económico constante, un mercado laboral fuerte y la inflación que se mantiene por encima del objetivo del 2% de la Fed como razones para un enfoque cauteloso. Sus comentarios se alinearon con las opiniones de la gobernadora del FOMC, Michelle Bowman, quien ha abogado consistentemente por una postura prudente en los ajustes de tasas.
Hasta ahora, la probabilidad de un recorte de tasas de 25 puntos básicos este mes se sitúa en aproximadamente el 75%, según la herramienta FedWatch del CME Group. Sin embargo, los inversores anticipan no más de 75 puntos básicos de flexibilización en los próximos 12 meses.
El regreso del expresidente Donald Trump a la Casa Blanca ha generado preocupaciones sobre la reanudación de las presiones inflacionarias. Sus políticas propuestas podrían alterar significativamente el panorama económico, con medidas fiscales más laxas, la reintroducción de aranceles a las exportaciones de China, Europa, México, Canadá y las naciones BRICS, así como políticas de inmigración más estrictas.
De hecho, ya ha comenzado un nuevo capítulo en la guerra comercial entre EE.UU. y China. China anunció recientemente una prohibición de exportar galio, germanio y antimonio a EE.UU., minerales críticos para las tecnologías militares. Esta medida se produjo un día después de que Washington introdujera nuevas restricciones dirigidas a la industria de semiconductores de China.
Aunque Powell ha declinado repetidamente especular sobre los impactos económicos de las posibles políticas bajo una renovada administración Trump, es probable que cualquier resurgimiento de las presiones inflacionarias podría llevar a la Fed a pausar o incluso detener su actual ciclo de flexibilización.
En medio de estos desarrollos, el Dólar estadounidense (USD) se disparó en octubre y noviembre antes de entrar en un período de consolidación/corrección. Sin embargo, esta pausa debería ser temporal, dejando sin cambios la perspectiva alcista para 2025.
La política monetaria de Estados Unidos está dirigida por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de los precios y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos objetivos es ajustar los tipos de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Reserva Federal, ésta sube los tipos de interés, incrementando los costes de los préstamos en toda la economía. Esto se traduce en un fortalecimiento del Dólar estadounidense (USD), ya que hace de Estados Unidos un lugar más atractivo para que los inversores internacionales coloquen su dinero. Cuando la inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Reserva Federal puede bajar los tipos de interés para fomentar el endeudamiento, lo que pesa sobre el billete verde.
La Reserva Federal (Fed) celebra ocho reuniones al año, en las que el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) evalúa la situación económica y toma decisiones de política monetaria. El FOMC está formado por doce funcionarios de la Reserva Federal: los siete miembros del Consejo de Gobernadores, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York y cuatro de los once presidentes de los bancos regionales de la Reserva, que ejercen sus cargos durante un año de forma rotatoria.
En situaciones extremas, la Reserva Federal puede recurrir a una política denominada Quantitative Easing (QE). El QE es el proceso por el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Es una medida de política no estándar utilizada durante las crisis o cuando la inflación es extremadamente baja. Fue el arma elegida por la Fed durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos de alta calidad de instituciones financieras. El QE suele debilitar al Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso a la QE, por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a instituciones financieras y no reinvierte el capital de los bonos que tiene en cartera que vencen, para comprar nuevos bonos. Suele ser positivo para el valor del Dólar estadounidense.
Las instituciones financieras cobran los tipos de interés sobre los préstamos a los prestatarios y los pagan como intereses a los ahorradores y depositantes. En ellos influyen los tipos básicos de interés, que fijan los bancos centrales en función de la evolución de la economía. Normalmente, los bancos centrales tienen el mandato de garantizar la estabilidad de los precios, lo que en la mayoría de los casos significa fijar como objetivo una tasa de inflación subyacente en torno al 2%.
Si la inflación cae por debajo del objetivo, el banco central puede recortar los tipos básicos de interés, con el fin de estimular el crédito e impulsar la economía. Si la inflación aumenta sustancialmente por encima del 2%, el banco central suele subir los tipos de interés de los préstamos básicos para intentar reducir la inflación.
En general, unos tipos de interés más elevados contribuyen a reforzar la moneda de un país, ya que lo convierten en un lugar más atractivo para que los inversores mundiales aparquen su dinero.
Los tipos de interés más altos influyen en el precio del Oro porque aumentan el coste de oportunidad de mantener Oro en lugar de invertir en un activo que devengue intereses o depositar efectivo en el banco.
Si los tipos de interés son altos, el precio del Dólar estadounidense (USD) suele subir y, como el Oro cotiza en dólares, el precio del Oro baja.
La tasa de los fondos federales es el tipo a un día al que los bancos estadounidenses se prestan entre sí. Es el tipo de interés oficial que suele fijar la Reserva Federal en sus reuniones del FOMC. Se fija en una horquilla, por ejemplo 4.75%-5.00%, aunque el límite superior (en este caso 5.00%) es la cifra citada.
Las expectativas del mercado sobre el tipo de interés de los fondos de la Reserva Federal son seguidas por la herramienta FedWatch del CME, que determina el comportamiento de muchos mercados financieros en previsión de futuras decisiones de política monetaria de la Reserva Federal.