El USD/MXN marcó un máximo del día en 20.01 $, donde atrajo vendedores que llevaron la paridad a un mínimo diario en 19.80. Al momento de escribir, el precio del dólar estadounidense cotiza frente al Peso mexicano en 19.87, cayendo un 0.57% diario.
Con base en información dada a conocer por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la Confianza del consumidor se situó en 47.6 puntos en agosto, superando los 46.9 puntos registrados en julio y observando alzas mensuales en los componentes que evalúan la situación económica de los miembros del hogar en México.
Por otro lado, el Índice de Precios al Consumo de México subió un 0.01% en agosto, luego de un incremento de un 1.05% en julio, cifra menor al 0.09% esperado por el consenso de analistas. A nivel interanual, la inflación se situó en 4.99% desde un 5.57% previo, menor al 5.09% esperado por el mercado.
Los inversionistas centrarán su atención el miércoles cuando se publique la Producción Industrial de México correspondiente a julio, cuyo estimado es ubica en 1.1%, mayor al -0.7% registrado en junio.
El USD/MXN formó una resistencia en el corto plazo en 20.15, dado por el máximo del 5 de septiembre. El primer soporte lo encontramos en 19.35, mínimo del 28 de agosto qué converge con el retroceso al 78.6% de Fibonacci. El siguiente soporte clave está en 18.59, punto pivote del 16 de agosto. El Índice de Fuerza Relativa está en 61.75 por encima de la línea media de 50, favoreciendo la perspectiva alcista en el corto plazo.
Gráfico diario del USD/MXN
El Dólar estadounidense (USD) es la moneda oficial de los Estados Unidos de América, y la moneda "de facto" de un número significativo de otros países donde se encuentra en circulación junto con los billetes locales. Según datos de 2022, es la divisa más negociada del mundo, con más del 88% de todas las operaciones mundiales de cambio de divisas, lo que equivale a una media de 6.6 billones de dólares en transacciones diarias. Tras la Segunda Guerra Mundial, el USD tomó el relevo de la libra esterlina como moneda de reserva mundial.
El factor individual más importante que influye en el valor del Dólar estadounidense es la política monetaria, que está determinada por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de precios (controlar la inflación) y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos dos objetivos es ajustar las tasas de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Fed, ésta sube los tipos, lo que favorece la cotización del dólar. Cuando la Inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Fed puede bajar las tasas de interés, lo que pesa sobre el Dólar.
En situaciones extremas, la Reserva Federal también puede imprimir más dólares y promulgar la flexibilización cuantitativa (QE). La QE es el proceso mediante el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Se trata de una medida de política no convencional que se utiliza cuando el crédito se ha agotado porque los bancos no se prestan entre sí (por miedo al impago de las contrapartes). Es el último recurso cuando es poco probable que una simple bajada de las tasas de interés logre el resultado necesario. Fue el arma elegida por la Fed para combatir la contracción del crédito que se produjo durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos del gobierno estadounidense, principalmente de instituciones financieras. El QE suele conducir a un debilitamiento del Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a las instituciones financieras y no reinvierte el capital de los valores en cartera que vencen en nuevas compras. Suele ser positivo para el dólar estadounidense.