La importancia del Dólar como moneda de reserva y como moneda de denominación para el comercio y las transacciones financieras no ha disminuido a pesar del peso decreciente de Estados Unidos en la economía mundial, según informan los analistas de Natixis.
EE.UU. representaba el 35% del PIB mundial en 1986, el 26% en 1990, el 29% en 2000, el 24% en 2010 y el 25% en 2022, por lo que el tamaño de Estados Unidos en relación con la economía mundial no ha dejado de disminuir.
Sin embargo, la participación del Dólar en la facturación comercial, las reservas de divisas, la emisión internacional de bonos y las transacciones en divisas no ha caído.
Esta resistencia del peso económico y financiero del Dólar, a pesar de la disminución del peso económico y financiero de EE.UU., demuestra que el sistema monetario internacional se organiza mejor en torno a una única moneda de reserva.