El S&P 500 rebotó con fuerza desde un mínimo del 6 de noviembre en 5.799, donde atrajo compradores agresivos que impulsaron el índice a un máximo de dos días en 5.980. Al momento de escribir, el S&P 500 cotiza sobre 5.933, ganando un 1.17% el día de hoy.
La compañía líder de citas en línea Match Group (MTCH) presenta una ganancia diaria de un 6.70% en el precio de su acción, cotizando el momento de escribir sobre 33.76$, llegando a máximos no vistos desde el 9 de diciembre en 33.89$. En la misma sintonía, los valores de Enphase Energy (ENPH) repuntan un 8.59% en la jornada del viernes, visitando máximos de dos días en 71.88$.
Por otro lado, la Oficina de Análisis Económico de Estados Unidos reportó que el índice subyacente de precios del gasto en consumo personal se situó en 2.8% anual en noviembre, igualando el registro del mes anterior y ubicándose por debajo del 2.9% esperado por el mercado.
El S&P 500 cierra con una pérdida semanal de un 1.90%, firmando su segunda semana consecutiva a la baja, junto con los principales índices accionarios.
El S&P 500 reaccionó a la baja en una resistencia de corto plazo dada por el máximo del 18 de diciembre en 6.069. El siguiente nivel de resistencia clave se encuentra en 6.098, máximo histórico del 6 de diciembre. Al sur, el soporte clave está en 5.800, punto pivote del 20 de diciembre.
Gráfica de 3 horas del S&P 500
El S&P 500 es un índice bursátil muy seguido que mide el rendimiento de 500 empresas públicas y se considera una medida amplia del mercado bursátil estadounidense. La influencia de cada empresa en el cálculo del índice se pondera en función de la capitalización bursátil. Ésta se calcula multiplicando el número de acciones cotizadas de la empresa por el precio de la acción. El índice S&P 500 ha logrado rendimientos impresionantes: 1.00$ invertido en 1970 habría producido un rendimiento de casi 192.00$ en 2022. La rentabilidad media anual desde su creación en 1957 ha sido del 11.9%.
Las empresas se seleccionan por comité, a diferencia de otros índices en los que se incluyen en función de normas establecidas. Aun así, deben cumplir ciertos criterios de elegibilidad, el más importante de los cuales es la capitalización bursátil, que debe ser igual o superior a 12.700 millones de dólares. Otros criterios son la liquidez, el domicilio, la capitalización bursátil, el sector, la viabilidad financiera, el tiempo de cotización y la representación de los sectores de la economía de Estados Unidos. Las nueve mayores empresas del índice representan el 27.8% de la capitalización bursátil del índice.
Hay varias formas de operar con el S&P 500. La mayoría de los corredores minoristas y plataformas de spread betting permiten a los operadores utilizar Contratos por Diferencia (CFD) para realizar apuestas sobre la dirección del precio. Además, se pueden comprar fondos indexados, fondos de inversión y fondos cotizados (ETF) que siguen la cotización del S&P 500. El más líquido de los ETF es el ETF de la Bolsa de Londres. El más líquido de los ETF es el SPY de State Street Corporation. El Chicago Mercantile Exchange (CME) ofrece contratos de futuros sobre el índice y el Chicago Board of Options (CMOE) ofrece opciones, así como ETF, ETF inversos y ETF apalancados.
Son muchos los factores que impulsan al S&P 500, pero principalmente es el rendimiento agregado de las empresas que lo componen, revelado en sus informes de resultados trimestrales y anuales. Los datos macroeconómicos estadounidenses y mundiales también contribuyen, ya que influyen en la confianza de los inversores, que si es positiva impulsa las ganancias. El nivel de los tipos de interés, fijado por la Reserva Federal (Fed), también influye en el S&P 500, ya que afecta al coste del crédito, del que dependen en gran medida muchas empresas. Por lo tanto, la inflación puede ser un factor determinante, así como otros parámetros que influyen en las decisiones de la Reserva Federal.