El precio del Oro (XAU/USD) extiende su movimiento de consolidación el miércoles y oscila en un rango estrecho por debajo del nivel de 2.650 $ durante la sesión asiática. Los operadores ahora parecen reacios y optan por esperar más señales sobre la senda de recorte de tasas de la Reserva Federal (Fed) antes de abrir posiciones direccionales. Por lo tanto, la atención del mercado seguirá centrada en el discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, más tarde hoy. Aparte de esto, el informe de nóminas no agrícolas (NFP) de EE.UU., que se sigue de cerca, debería guiar a los responsables de la política monetaria de la Fed en su próxima decisión de política monetaria y proporcionar un impulso significativo al metal amarillo sin rendimiento.
Mientras tanto, los datos positivos de EE.UU. publicados el martes aliviaron los temores de una desaceleración significativa en el mercado laboral. Esto, junto con las expectativas de que las políticas expansivas del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, impulsarán la inflación, podría obligar a la Fed a adoptar una postura cautelosa sobre el recorte de tasas. Esto, a su vez, sigue siendo un apoyo para un modesto repunte en los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU., lo que actúa como un viento de cola para el Dólar estadounidense (USD) y limita el alza del precio del Oro. Dicho esto, la persistente incertidumbre geopolítica y las preocupaciones sobre los planes arancelarios de Trump continúan ofreciendo cierto soporte al XAU/USD de refugio seguro.
Desde una perspectiva técnica, la reciente acción del precio dentro del rango aún podría clasificarse como una fase de consolidación bajista en el contexto de la caída de la semana pasada. Además, la ruptura de esta semana por debajo de un canal ascendente de cuatro días favorece a los bajistas. Dicho esto, los osciladores neutrales en el gráfico diario sugieren que cualquier caída adicional por debajo del mínimo de la noche, en torno al área de 2.622-2.621 $, podría seguir encontrando cierto soporte cerca del nivel de 2.600 $. Mientras tanto, algunas ventas continuas podrían exponer la media móvil simple (SMA) de 100 días, actualmente en torno a la zona de 2.579-2.578 $, por debajo de la cual el precio del Oro podría volver a probar el mínimo mensual de noviembre, en torno a la región de 2.537-2.536 $.
Por otro lado, el área de 2.655 $, seguida por la región de 2.666 $ podría actuar como barreras inmediatas fuertes. El siguiente obstáculo relevante está situado cerca de la zona de 2.677-2.678 $, por encima de la cual el precio del Oro podría apuntar a recuperar la cifra redonda de 2.700 $. Cualquier movimiento adicional al alza probablemente enfrentará una fuerte resistencia cerca de la zona de oferta de 2.721-2.722 $. Una fortaleza sostenida más allá de esta última podría cambiar el sesgo a favor de los alcistas y allanar el camino para un movimiento de apreciación significativo en el corto plazo.
El Oro ha desempeñado un papel fundamental en la historia de la humanidad, ya que se ha utilizado ampliamente como depósito de valor y medio de intercambio. En la actualidad, aparte de su brillo y su uso para joyería, el metal precioso se considera un activo refugio, lo que significa que se considera una buena inversión en tiempos turbulentos. El Oro también se considera una cobertura contra la inflación y la depreciación de las divisas, ya que no depende de ningún emisor o gobierno concreto.
Los bancos centrales son los mayores tenedores de Oro. En su objetivo de respaldar sus divisas en tiempos turbulentos, los bancos centrales tienden a diversificar sus reservas y a comprar Oro para mejorar la percepción de fortaleza de la economía y de la divisa. Unas reservas de Oro elevadas pueden ser una fuente de confianza para la solvencia de un país. Los bancos centrales añadieron 1.136 toneladas de Oro por valor de unos 70.000 millones de dólares a sus reservas en 2022, según datos del Consejo Mundial del Oro. Se trata de la mayor compra anual desde que existen registros. Los bancos centrales de economías emergentes como China, India y Turquía están aumentando rápidamente sus reservas de Oro.
El Oro tiene una correlación inversa con el Dólar estadounidense y los bonos del Tesoro de EE.UU., que son los principales activos de reserva y refugio. Cuando el Dólar se deprecia, el precio del Oro tiende a subir, lo que permite a los inversores y a los bancos centrales diversificar sus activos en tiempos turbulentos. El Oro también está inversamente correlacionado con los activos de riesgo. Un repunte en el mercado bursátil tiende a debilitar el precio del Oro, mientras que las ventas masivas en los mercados de mayor riesgo tienden a favorecer al metal precioso.
El precio del Oro puede moverse debido a una amplia gama de factores. La inestabilidad geopolítica o el temor a una recesión profunda pueden hacer que el precio del Oro suba rápidamente debido a su condición de activo refugio. Como activo sin rendimiento, el precio del Oro tiende a subir cuando bajan los tipos de interés, mientras que el encarecimiento del dinero suele lastrar al metal amarillo. Aun así, la mayoría de los movimientos dependen de cómo se comporte el Dólar estadounidense (USD), ya que el activo se cotiza en dólares (XAU/USD). Un Dólar fuerte tiende a mantener controlado el precio del Oro, mientras que un Dólar más débil probablemente empuje al alza los precios del Oro.