El Peso mexicano continúa apreciándose frente al Dólar estadounidense mientras el apetito del mercado sigue siendo negativo, mientras que el presidente de la Fed, Jerome Powell, enfatizó que sigue ligeramente enfocado en la inflación ya que la economía está cerca del máximo empleo. Al momento de escribir, el USD/MXN cotiza a 19.96, con una caída del 0.58%.
El estado de ánimo del mercado es pesimista ya que persisten los temores sobre los aranceles. La imposición de restricciones por parte de EE.UU. a las exportaciones de chips a China pesó sobre las principales empresas de semiconductores, enviando al NASDAQ, que está muy centrado en la tecnología, a la baja. A pesar de esto, los datos del Producto Interno Bruto (PIB) de China, que fueron mejores de lo esperado en el Q1 de 2025, impulsaron a las divisas de mercados emergentes (EM) como el Peso.
Powell dijo que la política está bien posicionada, añadiendo que la economía es "sólida" a pesar de la incertidumbre y los riesgos a la baja. Afirmó que el crecimiento probablemente se desaceleró en el Q1 de 2025, generando la posibilidad de un escenario de estanflación, después de decir: "Los dos objetivos de la Fed aún no están en tensión, pero el impulso es hacia un mayor desempleo y una mayor inflación."
Mientras tanto, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, continuó negociando con su homólogo estadounidense para evitar los aranceles más altos de Trump y dijo que los aranceles del 20.91% sobre los tomates no se llevarán a cabo. Añadió: "Este proceso se ha realizado muchas veces, y México siempre ha ganado. Pero incluso si se aplicara esta sanción, los tomates mexicanos seguirían exportándose a los Estados Unidos porque no hay sustituto; el principal problema sería que los tomates serían más caros en los Estados Unidos."
Al otro lado de la frontera, las ventas minoristas de EE.UU. fueron mejores de lo esperado, mientras que la producción industrial de EE.UU. se contrajo más de lo previsto.
En la agenda, México presentará las ventas minoristas, la inflación a mitad de mes para abril y la actividad económica de febrero hasta la próxima semana. En EE.UU., se revelarán datos sobre vivienda y solicitudes iniciales de desempleo el jueves.
La tendencia alcista del USD/MXN se mantiene intacta, aunque el par se desliza por debajo del nivel de 20.00. Los vendedores parecen dispuestos a probar la SMA de 200 días en 19.86, pero necesitarán superarla en un cierre diario, por lo que podrían seguir esperanzados de desafiar la cifra de 19.50. En ese caso, el siguiente soporte sería 19.00.
Por el contrario, si los compradores empujan el tipo de cambio USD/MXN por encima de 20.00, esto podría abrir la puerta para probar el máximo del 14 de abril de 20.29, lo que abriría la puerta a la confluencia de la SMA de 50 días y 100 días cerca de 20.30–20.36, seguida de la resistencia de 20.50. Superar esos niveles podría llevar a una nueva prueba del pico del 9 de abril en 21.07.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.