El cruce EUR/JPY se debilita alrededor de 161.05 durante la sesión europea del jueves. El Yen japonés (JPY) se fortalece frente al Euro (EUR) ya que el Índice de Precios de Producción (PPI) japonés más fuerte de lo esperado mantiene abierta la puerta a más aumentos de tasas por parte del Banco de Japón (BoJ).
Técnicamente, la perspectiva constructiva del EUR/JPY parece vulnerable ya que el cruce se mantiene alrededor de la Media Móvil Exponencial (EMA) de 100 días clave en el gráfico diario. El cruce podría reanudar su movimiento a la baja si cierra por debajo de la Media Móvil Exponencial (EMA) de 100 días clave en el gráfico diario. Una mayor consolidación parece favorable, con el Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días situado alrededor de la línea media, mostrando un impulso neutral a corto plazo.
El primer objetivo a la baja para el EUR/JPY se sitúa en 160.35, el límite inferior de la Banda de Bollinger. Un comercio sostenido por debajo del nivel mencionado podría ver una caída hacia el nivel psicológico de 160.00. El filtro adicional a la baja a tener en cuenta es 159.12, el mínimo del 6 de marzo.
Por otro lado, el nivel de resistencia inmediato para el cruce surge en 162.20, el máximo del 9 de abril. Ganancias extendidas podrían ver un repunte hacia 163.40, el límite superior de la Banda de Bollinger. El siguiente obstáculo se sitúa en 164.84, el máximo del 27 de diciembre de 2024.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.