El USD/MXN ha alcanzado un máximo diario en 20.30 en la apertura europea del miércoles. Tras la publicación de los datos del IPC de EE.UU. más bajos de lo esperado, el par ha caído a un mínimo de casi siete semanas em 20.17. Al momento de escribir, el par cotiza sobre 20.18, cayendo un 0.39% diario.
El Índice del Dólar estadounidense (DXY) ha caído a un nuevo mínimo de cinco meses tras la publicación de la inflación de Estados Unidos, que ha resultado por debajo de lo esperado. Inmediatamente después, el USD ha repuntado, rebotando a 103.78 y mostrando una ligera ganancia en el día, ya que el mercado no ha considerado que la moderación de la inflación sea lo suficientemente importante como para hacer dudar a la Fed sobre un avance en el recorte de tasas a mayo.
La inflación estadounidense se ha suavizado en febrero al 2.8% anual desde el 3% de enero, mejorando el 2.9% previsto. El IPC subyacente ha bajado al 3.1% desde el 3.3%, situándose levemente por debajo del 3.2% estimado.
La herramienta FedWatch de CME Group sitúa en el 33.7% las probabilidades de un recorte de tasas en mayo, por debajo del 38.9% de posibilidades de ayer Para junio las posibilidades suben al 80.7%, sin sobrepasar el 84.2% proyectado ayer.
Por otra parte, hoy han entrado en vigor los aranceles del 25% que Estados Unidos impondrá al acero y el aluminio. México es uno de los países más afectados, ya que es el tercer proveedor de acero para su vecino del norte. El Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, viajó ayer a Washington para intentar llegar a un acuerdo y evitar estos aranceles, declarando que “Eso nos obligaría a nosotros a poner tarifas también. Es decir, entras en un circulo vicioso de nunca acabar con costos muy grandes para ambos países”. La posibilidad de reducción de los aranceles por parte del ejecutivo de Donald Trump está impulsando al Peso mexicano frente al Dólar.
El Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 apunta que podríamos ver una extensión del descenso en las próximas horas. En caso de quebrar por debajo de 20.17, el par encontrará un fuerte soporte en 20.13, suelo del 2025 registrado el 24 de enero. Una ruptura de este nivel llevaría al par hacia la zona psicológica de 20.00.
Al alza, la resistencia inicial está en la media móvil de 100 períodos en 20.38. Por encima, el objetivo estará en 20.50, máximo del 6 de marzo. Una ruptura por encima de este nivel apuntará hacia la zona de 21.00.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.