El EUR/USD mantiene ganancias cerca del nivel clave de 1.0500 en la sesión europea del martes. El par de divisas principal se mantiene firme ya que los líderes europeos, incluido el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, acordaron estructurar un plan de paz para poner fin a la guerra de tres años en Ucrania. La disposición de Europa para detener la masacre en Ucrania ha mejorado el atractivo del Euro (EUR), asumiendo que una tregua entre Rusia y Kyiv restauraría la fracturada cadena de suministro de la zona euro.
Esta semana, el principal desencadenante para el Euro es la decisión de política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), que está programada para el jueves.
Según la encuesta de Reuters del 19 al 27 de febrero, el BCE recortará su tasa de facilidad de depósito en 25 puntos básicos (pbs) a 2.5%. Este sería el quinto recorte de tasas de interés consecutivo del BCE, el sexto desde que el banco central comenzó su ciclo de relajación en junio de 2024. Los votos moderados para la decisión de tasas de interés del BCE fueron impulsados por temores de que la agenda arancelaria del presidente de EE.UU., Donald Trump, dañará el crecimiento económico de la zona euro.
Además, los funcionarios del BCE han mantenido la confianza en que las presiones inflacionarias volverán de manera sostenible a la tasa deseada del 2% este año.
Los inversores prestarán mucha atención al comunicado de política monetaria y a la conferencia de prensa de la presidenta del BCE, Christine Lagarde, después de la decisión de política. Los participantes del mercado quieren saber cuándo el BCE volverá a una postura neutral y cómo la agenda arancelaria de Trump impactará en las perspectivas de inflación.
El EUR/USD cotiza firme cerca de 1.0500 en las horas de negociación europeas del martes. El par de divisas principal cotiza por encima de la media móvil exponencial (EMA) de 20 días, que está alrededor de 1.0440, lo que sugiere que la tendencia a corto plazo es alcista.
El Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días oscila dentro del rango de 40.00-60.00, lo que indica una tendencia lateral.
Mirando hacia abajo, el mínimo del 10 de febrero de 1.0285 actuará como la zona de soporte principal para el par. Por el contrario, el máximo del 6 de diciembre de 1.0630 será la barrera clave para los alcistas del Euro.
El Euro es la moneda de los 19 países de la Unión Europea que pertenecen a la eurozona. Es la segunda moneda más negociada del mundo, detrás del dólar estadounidense. En 2022, representó el 31 % de todas las transacciones de divisas, con un volumen de negocios diario promedio de más de 2,2 billones de dólares al día. El EUR/USD es el par de divisas más negociado del mundo, con un estimado del 30 % de todas las transacciones, seguido del EUR/JPY (4 %), el EUR/GBP (3 %) y el EUR/AUD (2 %).
El Banco Central Europeo (BCE), con sede en Frankfurt (Alemania), es el banco de reserva de la eurozona. El BCE establece los tipos de interés y gestiona la política monetaria. El mandato principal del BCE es mantener la estabilidad de precios, lo que significa controlar la inflación o estimular el crecimiento. Su principal herramienta es la subida o la bajada de los tipos de interés. Los tipos de interés relativamente altos (o la expectativa de tipos más altos) suelen beneficiar al euro y viceversa. El Consejo de Gobierno del BCE toma decisiones sobre política monetaria en reuniones que se celebran ocho veces al año. Las decisiones las toman los directores de los bancos nacionales de la Eurozona y seis miembros permanentes, entre ellos la presidenta del BCE, Christine Lagarde.
Los datos de inflación de la eurozona, medidos por el Índice Armonizado de Precios al Consumidor (IPCA), son un importante indicador econométrico para el euro. Si la inflación aumenta más de lo esperado, especialmente si supera el objetivo del 2% del BCE, obliga al BCE a subir los tipos de interés para volver a controlarla. Los tipos de interés relativamente altos en comparación con sus homólogos suelen beneficiar al euro, ya que hacen que la región sea más atractiva como lugar para que los inversores globales depositen su dinero.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden tener un impacto en el euro. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios, el empleo y las encuestas de confianza del consumidor pueden influir en la dirección de la moneda única. Una economía fuerte es buena para el Euro. No sólo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al BCE a subir los tipos de interés, lo que fortalecerá directamente al euro. De lo contrario, si los datos económicos son débiles, es probable que el Euro caiga. Los datos económicos de las cuatro mayores economías de la zona del euro (Alemania, Francia, Italia y España) son especialmente significativos, ya que representan el 75% de la economía de la zona del euro.
Otro dato importante que se publica sobre el Euro es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda ganará valor simplemente por la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo