El cruce EUR/JPY cae a cerca de 156.25 durante la sesión europea del martes. El Yen japonés (JPY) avanza ligeramente debido al sentimiento de aversión al riesgo y al nuevo temor a tensiones comerciales por parte del presidente de EE.UU., Donald Trump. Los inversores estarán atentos a los comentarios de la Fed más tarde el martes.
La demanda de activos de refugio seguro se dispara en medio de crecientes preocupaciones sobre los riesgos arancelarios. El ministro de Finanzas de Japón, Katsunobu Kato, dijo a primera hora del martes que el país no está persiguiendo una política de devaluación del Yen japonés. Además, las preocupaciones sobre la posible desaceleración económica en EE.UU. aumentaron las expectativas de recortes adicionales de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed). Esto, a su vez, podría pesar sobre el Dólar y beneficiar el estatus de refugio seguro relativo del JPY.
La creciente especulación de que el Banco de Japón (BoJ) subirá la tasa de interés más pronto que tarde podría seguir respaldando al JPY. Se anticipa ampliamente que el BoJ continúe subiendo este año, apoyado por la mejora de las condiciones económicas, el aumento de precios y un crecimiento salarial más fuerte, que se alinean con los esfuerzos de normalización de la política del banco central japonés.
En cuanto al Euro, se espera que el Banco Central Europeo (BCE) recorte su Tasa de Depósito en 25 puntos básicos (pbs) hasta el 2.5%, lo que pesa sobre el Euro (EUR). La inflación de precios al consumidor en la Eurozona se desaceleró al 2.4% en febrero desde la lectura anterior del 2.5%, acercándose un paso más al objetivo del 2% del BCE.
El Banco Central Europeo (BCE), con sede en Frankfurt (Alemania), es el banco de reserva de la zona euro. El BCE fija los tipos de interés y gestiona la política monetaria de la región.
El principal mandato del BCE es mantener la estabilidad de los precios, lo que significa mantener la inflación en torno al 2%. Su principal herramienta para lograrlo es subir o bajar los tipos de interés. Unos tipos de interés relativamente altos suelen traducirse en un Euro más fuerte, y viceversa.
El Consejo de Gobierno del BCE adopta las decisiones de política monetaria en reuniones que se celebran ocho veces al año. Las decisiones las adoptan los directores de los bancos nacionales de la zona del euro y seis miembros permanentes, entre ellos la presidenta del BCE, Christine Lagarde.
En situaciones extremas, el Banco Central Europeo puede poner en marcha una herramienta política denominada Quantitative Easing (relajación cuantitativa). El QE es el proceso por el cual el BCE imprime Euros y los utiliza para comprar activos (normalmente bonos del Estado o de empresas) a bancos y otras instituciones financieras. El resultado suele ser un Euro más débil..
El QE es un último recurso cuando es improbable que una simple bajada de los tipos de interés logre el objetivo de estabilidad de precios. El BCE lo utilizó durante la Gran Crisis Financiera de 2009-11, en 2015 cuando la inflación se mantuvo obstinadamente baja, así como durante la pandemia de coronavirus.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el reverso del QE. Se lleva a cabo después del QE, cuando la recuperación económica está en marcha y la inflación empieza a aumentar. Mientras que en el QE el Banco Central Europeo (BCE) compra bonos del Estado y de empresas a las instituciones financieras para proporcionarles liquidez, en el QT el BCE deja de comprar más bonos y deja de reinvertir el principal que vence de los bonos que ya posee. Suele ser positivo (o alcista) para el Euro.