El Peso mexicano recupera algo de terreno frente al Dólar estadounidense el lunes, un día antes de que se apliquen aranceles del 25% a los bienes mexicanos importados a Estados Unidos (EE.UU.) como prometió el presidente Donald Trump. Sin embargo, el Peso sube ya que los datos económicos decentes de EE.UU. hicieron poco para contrarrestar las proyecciones de que la economía podría no crecer en el primer trimestre de 2025, según el modelo GDPNow de la Fed de Atlanta. El USD/MXN cotiza a 20.41, con una caída del 0.41%.
Durante el fin de semana, el secretario de Comercio de EE.UU. dijo que los aranceles sobre México y Canadá comenzarán el martes, pero que Trump determinará si se mantiene en el nivel proyectado del 25%. Si los aranceles avanzan como se proyecta, podría llevar a los operadores a buscar la seguridad del Dólar estadounidense (USD) y empujar al USD/MXN al alza. De lo contrario, el Peso podría mantener un repunte de alivio, y el par podría continuar bajando.
Los datos económicos de México mostraron que la actividad manufacturera empresarial se contrajo por octavo mes consecutivo, reveló S&P Global. Al mismo tiempo, la confianza empresarial en febrero continuó mostrando un deterioro, revelado por la Agencia Nacional de Estadística (INEGI), subrayando el sombrío panorama económico.
Se reveló la encuesta de economistas privados del Banco de México (Banxico), y los analistas esperan que el crecimiento se mantenga por debajo del 1%, mientras que las expectativas de inflación permanecen sin cambios.
Al otro lado de la frontera, los datos del PMI manufacturero revelados por S&P Global y el Instituto de Gestión de Suministros (ISM) fueron mixtos. El primero se expandió en comparación con las cifras de enero, mientras que el ISM cayó pero se mantuvo en territorio de expansión.
La tendencia alcista del USD/MXN se mantiene, aunque el par exótico se ha consolidado dentro del rango de 20.20–20.70 durante los últimos 18 días, lo que sugiere que los compradores no están comprometidos a empujar los precios al contado al alza. A corto plazo, el momentum se inclina a la baja, como lo indica el Índice de Fuerza Relativa (RSI) que se vuelve bajista.
Para una continuación bajista, el USD/MXN debe superar la media móvil simple (SMA) de 100 días en 20.30. Una vez superada, la siguiente parada sería la cifra de 20.00 antes de la SMA de 200 días en 19.50. Por otro lado, si los compradores empujan el tipo de cambio por encima de 20.50, deben superar el último pico visto en 20.71 el 6 de febrero, antes de probar el máximo del 3 de febrero en 21.28.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.