El Banco de México, también conocido como Banxico, reveló sus actas de política monetaria para la decisión anunciada el 6 de febrero. El Banco Central decidió reducir los costos de endeudamiento en 50 puntos básicos (pbs) a 9.50% mediante una votación de 4 a 1, con el Vicegobernador Jonathan Heath apoyando un recorte de tasas de 25 pbs.
Todos los miembros señalaron que la debilidad de la economía mexicana se intensificó en el cuarto trimestre de 2024.
La mayoría de los miembros afirmaron que, según la estimación preliminar, el PIB se contrajo con respecto al trimestre anterior. Destacaron que el crecimiento anual del PIB habría sido del 1.5% en 2024 en su conjunto, en contraste con el crecimiento superior al 3% en cada uno de los dos años anteriores.
La mayoría de los miembros indicaron que la inversión se desaceleró notablemente en 2024.
La mayoría anticipó que la economía mexicana continuará creciendo a tasas bajas en 2025.
Algunos miembros mencionaron que el balance de riesgos para el crecimiento está sesgado a la baja.
La mayoría de los miembros coincidieron en que un posible impacto en los flujos comerciales entre México y Estados Unidos resultaría en una disminución de la actividad económica mexicana.
Todos los miembros coincidieron en que ha habido un progreso significativo en la resolución del episodio inflacionario derivado de los choques de la pandemia y la guerra en Ucrania.
La mayoría de los miembros señalaron que el comportamiento de la inflación subyacente refleja el progreso alcanzado. Comentaron que las perspectivas inflacionarias parecen más favorables que en los momentos más críticos del episodio inflacionario.
La mayoría de los miembros notaron que desde la última reunión de política monetaria, la inflación general disminuyó al 3.69% en la primera quincena de enero de 2025.
La mayoría de los miembros destacaron que la inflación general regresó al rango de variabilidad del 2-4% por primera vez desde entonces.
Otro miembro agregó que la inflación general anual ha disminuido 501 puntos básicos desde el pico del actual episodio inflacionario. Un miembro afirmó que, no obstante, sigue por encima del objetivo.
La mayoría de los miembros afirmaron que la reciente disminución de la inflación general estuvo asociada con la reducción significativa de la inflación no subyacente.
La mayoría notó que en su lectura más reciente, la inflación subyacente alcanzó el 3.72%. Comentaron que ha estado por debajo del 4% durante cuatro meses y medio.
La mayoría de los miembros enfatizaron la importancia del canal de expectativas en la transmisión de la política monetaria. Destacaron que estas se han mantenido ancladas a pesar de la complejidad del reciente episodio inflacionario. Afirmaron que esto es el resultado de la firme respuesta del Banco de México.
La mayoría de los miembros mencionaron que se espera que la inflación continúe disminuyendo como se anticipó anteriormente.
El Banco de México, también conocido como Banxico, es el banco central del país. Su misión es preservar el valor de la moneda mexicana, el Peso mexicano (MXN), y fijar la política monetaria. Para ello, su principal objetivo es mantener una inflación baja y estable dentro de los niveles objetivo –en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%.
La principal herramienta de Banxico para orientar la política monetaria es la fijación de las tasas de interés. Cuando la inflación se sitúa por encima de la meta, el banco intentará controlarla subiendo las tasas, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas y, por lo tanto, enfría la economía. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN. El diferencial de tasas con el Dólar, o la forma en que se espera que Banxico fije las tasas de interés en comparación con la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), es un factor clave.
Banxico se reúne ocho veces al año y su política monetaria está muy influenciada por las decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Por ello, el comité de toma de decisiones del banco central suele reunirse una semana después de la Fed. De esta manera, Banxico reacciona y en ocasiones se anticipa a las medidas de política monetaria fijadas por la Reserva Federal. Por ejemplo, después de la pandemia de Covid-19, antes de que la Fed subiera las tasas, Banxico lo hizo primero en un intento de disminuir las posibilidades de una depreciación sustancial del Peso mexicano (MXN) y evitar salidas de capital que pudieran desestabilizar al país.