El par USD/CHF gana tracción hasta cerca de 0.9060 durante la sesión europea temprana del viernes. La renovada demanda del Dólar estadounidense (USD) proporciona cierto soporte al par. Más tarde el viernes, los datos de empleo de EE.UU. para enero serán el centro de atención.
A pesar de la postura de línea dura, las estadísticas de LSEG mostraron que los mercados continúan esperando 46.3 puntos básicos (pbs) de reducciones de tasas de la Reserva Federal (Fed) para diciembre, con un recorte de un cuarto de punto completamente descontado para julio. Los datos del mercado laboral de enero de EE.UU. serán el punto culminante más tarde el viernes, ya que podrían ofrecer alguna pista sobre las perspectivas de tasas de interés en EE.UU. Un informe NFP más débil podría desencadenar expectativas moderadas de la Fed, debilitando al Dólar. Por otro lado, un resultado sorpresivo al alza podría confirmar el tono de línea dura de la Fed y podría impulsar al USD en general.
Oriente Medio y Europa condenan los planes de Trump de tomar el control de Gaza. El jueves, Trump dijo que Israel entregaría Gaza a Estados Unidos después de que terminara la lucha y la población del enclave ya estuviera reasentada en otro lugar, lo que, según él, significaba que no se necesitarían tropas estadounidenses en el terreno. Los inversores seguirán de cerca el desarrollo del riesgo geopolítico en Oriente Medio.
"Lo que Trump propone es claramente catastrófico para Gaza, pero también sería desestabilizador para los países de la región," Hugh Lovatt, investigador del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR), dijo a Euronews. Cualquier señal de aumento de tensiones podría impulsar la moneda de refugio seguro como el Franco suizo (CHF).
El Franco suizo (CHF) es la moneda oficial de Suiza. Se encuentra entre las diez monedas más negociadas a nivel mundial, alcanzando volúmenes que superan con creces el tamaño de la economía suiza. Su valor está determinado por el sentimiento general del mercado, la salud económica del país o las medidas adoptadas por el Banco Nacional Suizo (SNB), entre otros factores. Entre 2011 y 2015, el Franco suizo estuvo vinculado al Euro (EUR). La vinculación se eliminó abruptamente, lo que resultó en un aumento de más del 20% en el valor del franco, lo que provocó una turbulencia en los mercados. Aunque la vinculación ya no está en vigor, la suerte del franco suizo tiende a estar altamente correlacionada con la del euro debido a la alta dependencia de la economía suiza de la vecina eurozona.
El Franco suizo (CHF) se considera un activo de refugio seguro, o una moneda que los inversores tienden a comprar en épocas de tensión en los mercados. Esto se debe a la percepción que se tiene de Suiza en el mundo: una economía estable, un sector exportador fuerte, grandes reservas del banco central o una postura política de larga data hacia la neutralidad en los conflictos globales hacen que la moneda del país sea una buena opción para los inversores que huyen de los riesgos. Es probable que los tiempos turbulentos fortalezcan el valor del CHF frente a otras monedas que se consideran más riesgosas para invertir.
El Banco Nacional Suizo (BNS) se reúne cuatro veces al año (una vez cada trimestre, menos que otros bancos centrales importantes) para decidir sobre la política monetaria. El banco aspira a una tasa de inflación anual inferior al 2%. Cuando la inflación supera el objetivo o se prevé que lo superará en el futuro previsible, el banco intentará controlar el crecimiento de los precios elevando su tipo de referencia. Los tipos de interés más altos suelen ser positivos para el Franco suizo (CHF), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, los tipos de interés más bajos tienden a debilitar el CHF.
Los datos macroeconómicos publicados en Suiza son fundamentales para evaluar el estado de la economía y pueden afectar la valoración del Franco suizo (CHF). La economía suiza es estable en términos generales, pero cualquier cambio repentino en el crecimiento económico, la inflación, la cuenta corriente o las reservas de divisas del banco central tienen el potencial de desencadenar movimientos en el CHF. En general, un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y un alto nivel de confianza son buenos para el CHF. Por el contrario, si los datos económicos apuntan a un debilitamiento del impulso, es probable que el CHF se deprecie.
Como economía pequeña y abierta, Suiza depende en gran medida de la salud de las economías vecinas de la Eurozona. La Unión Europea en su conjunto es el principal socio económico de Suiza y un aliado político clave, por lo que la estabilidad de la política macroeconómica y monetaria en la eurozona es esencial para Suiza y, por ende, para el Franco suizo (CHF). Con tal dependencia, algunos modelos sugieren que la correlación entre la suerte del euro (EUR) y el Franco suizo es superior al 90%, o casi perfecta.