El cruce GBP/JPY cotiza en territorio negativo alrededor de 190.25 durante las primeras horas de negociación europeas del jueves. La creciente especulación de que el Banco de Japón (BoJ) seguiría subiendo las tasas de interés proporciona cierto apoyo al Yen japonés (JPY) y crea un obstáculo para el cruce.
Técnicamente, la perspectiva bajista del GBP/JPY sigue vigente ya que el par principal permanece limitado por debajo de la media móvil exponencial (EMA) clave de 100 periodos en el gráfico de 4 horas. Además, el impulso bajista está respaldado por el Índice de Fuerza Relativa (RSI), que se encuentra por debajo de la línea media alrededor de 37.00, sugiriendo que el camino de menor resistencia es a la baja.
El primer objetivo bajista para el cruce surge en la marca psicológica de 190.00. Las pérdidas extendidas podrían ver una caída al límite inferior de la Banda de Bollinger en 189.70. Una ruptura decisiva por debajo del nivel mencionado podría allanar el camino hacia 189.34, el mínimo del 17 de enero.
En el lado positivo, la EMA de 100 periodos en 192.40 actúa como un nivel de resistencia inmediato para el cruce. Un comercio sostenido por encima de este nivel podría atraer a algunos compradores hacia 193.54, el límite superior de la Banda de Bollinger. Más al norte, el siguiente obstáculo se observa en 194.71, el máximo del 27 de enero.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.