El Peso mexicano (MXN) se disparó en las primeras operaciones durante la sesión norteamericana a medida que surgieron cifras mixtas de crecimiento económico en México, aunque la debilidad general del Dólar estadounidense (USD) mantuvo la oferta del Peso. Al momento de escribir, el USD/MXN cotiza en 20.16, con una caída del 1%.
El Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI) reveló que la Actividad Económica de noviembre mejoró mensualmente pero no anualmente. Con más del 2.70% de ganancias, la moneda mexicana está lista para registrar su mejor desempeño semanal desde septiembre de 2024.
El presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Donald Trump, moderó sus comentarios sobre México y pronunció declaraciones optimistas sobre el país en el Foro Económico Mundial (WEF), lo que alivió los temores de política comercial y patrocinó una caída del USD/MXN.
Mientras tanto, la inflación de la primera quincena de enero se acercó al objetivo del 3% del Banco de México (Banxico). El Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió un 3.69% interanual, desde el 4.44% reportado en diciembre, mientras que el IPC subyacente subió moderadamente del 3.62% al 3.72% interanual.
En EE.UU., S&P Global reveló que la actividad manufacturera salió del territorio de contracción pero no logró impulsar al Dólar. Mientras tanto, el Sentimiento del Consumidor revelado por la Universidad de Michigan (UoM) se deterioró en comparación con las calificaciones preliminares, mientras que los datos de vivienda mejoraron a través de las Ventas de Viviendas Existentes.
La economía de México ha seguido enfriándose y se espera que crezca solo un 1% en 2025. La desaceleración benefició el proceso de desinflación y respalda la postura moderada de Banxico.
Se espera que la Reserva Federal (Fed) mantenga las tasas sin cambios. Las principales razones de la junta para esa decisión son la solidez de la economía estadounidense, como lo demuestra el saludable crecimiento económico, un mercado laboral fuerte y cifras de inflación más persistentes.
La próxima semana, la agenda económica de México incluirá la Balanza Comercial, datos de empleo y la lectura preliminar del Producto Interior Bruto (PIB) para el último trimestre de 2024.
El USD/MXN cae por debajo de la media móvil simple (SMA) de 50 días de 20.37 y amplió sus pérdidas hacia la SMA de 100 días en 20.22, pero los bajistas no lograron empujar los precios por debajo de esta última, ya que se consolida cerca del punto medio del rango 20.20 – 20.30.
El impulso se volvió bajista como lo muestra el Índice de Fuerza Relativa (RSI). Por lo tanto, si el USD/MXN cae por debajo de 20.20, el siguiente soporte sería la cifra de 20.00. En caso de mayor debilidad, el siguiente soporte sería el mínimo del 7 de noviembre de 19.75, antes del mínimo del 18 de octubre de 19.64.
Por el contrario, para una reanudación alcista, el USD/MXN debe subir por encima de 20.55 para que los compradores tengan un camino claro para desafiar el máximo del año hasta la fecha (YTD) en 20.90. Una vez superado, la siguiente parada sería 21.00, seguida del pico del 8 de marzo de 2022 en 21.46 antes de la cifra de 22.00.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.