El par USD/CHF permanece a la defensiva alrededor de 0.9045 durante la sesión europea temprana del viernes, presionado por la debilidad general del Dólar estadounidense (USD). Los operadores seguirán de cerca el Índice de Gerentes de Compras (PMI) preliminar de S&P de EE.UU. para enero, que se publicará más tarde el viernes.
Durante un discurso virtual en el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, el presidente de EE.UU., Donald Trump, pidió el jueves una reducción de las tasas de interés después de solicitar una reducción de los precios del petróleo establecidos por un grupo de naciones conocido como OPEP, que incluye a Arabia Saudí. "Con los precios del petróleo bajando, exigiré que las tasas de interés bajen inmediatamente, y de igual manera deberían estar bajando en todo el mundo," dijo Trump.
El Dólar sigue débil tras los comentarios de Trump. Los participantes del mercado esperan más señales de los datos económicos de EE.UU. y mayor claridad sobre los anuncios de aranceles. La Reserva Federal de EE.UU. (Fed) tiene programada su próxima decisión sobre las tasas de interés la próxima semana, y se espera ampliamente que mantenga las tasas de interés estables en el nivel actual de entre 4.25% y 4.5%, según la herramienta CME FedWatch.
Aunque las amenazas arancelarias de Trump tendrían solo un impacto limitado en la inflación suiza, la relajación de las tensiones geopolíticas en Oriente Medio después de que Israel y Hamas acordaran un alto el fuego podría limitar el alza del Franco suizo (CHF), una moneda refugio. Sin embargo, cualquier señal de nuevos riesgos geopolíticos o aumento de las incertidumbres globales podría impulsar al CHF frente al USD.
El Franco suizo (CHF) es la moneda oficial de Suiza. Se encuentra entre las diez monedas más negociadas a nivel mundial, alcanzando volúmenes que superan con creces el tamaño de la economía suiza. Su valor está determinado por el sentimiento general del mercado, la salud económica del país o las medidas adoptadas por el Banco Nacional Suizo (SNB), entre otros factores. Entre 2011 y 2015, el Franco suizo estuvo vinculado al Euro (EUR). La vinculación se eliminó abruptamente, lo que resultó en un aumento de más del 20% en el valor del franco, lo que provocó una turbulencia en los mercados. Aunque la vinculación ya no está en vigor, la suerte del franco suizo tiende a estar altamente correlacionada con la del euro debido a la alta dependencia de la economía suiza de la vecina eurozona.
El Franco suizo (CHF) se considera un activo de refugio seguro, o una moneda que los inversores tienden a comprar en épocas de tensión en los mercados. Esto se debe a la percepción que se tiene de Suiza en el mundo: una economía estable, un sector exportador fuerte, grandes reservas del banco central o una postura política de larga data hacia la neutralidad en los conflictos globales hacen que la moneda del país sea una buena opción para los inversores que huyen de los riesgos. Es probable que los tiempos turbulentos fortalezcan el valor del CHF frente a otras monedas que se consideran más riesgosas para invertir.
El Banco Nacional Suizo (BNS) se reúne cuatro veces al año (una vez cada trimestre, menos que otros bancos centrales importantes) para decidir sobre la política monetaria. El banco aspira a una tasa de inflación anual inferior al 2%. Cuando la inflación supera el objetivo o se prevé que lo superará en el futuro previsible, el banco intentará controlar el crecimiento de los precios elevando su tipo de referencia. Los tipos de interés más altos suelen ser positivos para el Franco suizo (CHF), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, los tipos de interés más bajos tienden a debilitar el CHF.
Los datos macroeconómicos publicados en Suiza son fundamentales para evaluar el estado de la economía y pueden afectar la valoración del Franco suizo (CHF). La economía suiza es estable en términos generales, pero cualquier cambio repentino en el crecimiento económico, la inflación, la cuenta corriente o las reservas de divisas del banco central tienen el potencial de desencadenar movimientos en el CHF. En general, un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y un alto nivel de confianza son buenos para el CHF. Por el contrario, si los datos económicos apuntan a un debilitamiento del impulso, es probable que el CHF se deprecie.
Como economía pequeña y abierta, Suiza depende en gran medida de la salud de las economías vecinas de la Eurozona. La Unión Europea en su conjunto es el principal socio económico de Suiza y un aliado político clave, por lo que la estabilidad de la política macroeconómica y monetaria en la eurozona es esencial para Suiza y, por ende, para el Franco suizo (CHF). Con tal dependencia, algunos modelos sugieren que la correlación entre la suerte del euro (EUR) y el Franco suizo es superior al 90%, o casi perfecta.