El par USD/CHF rebota a alrededor de 0.9070, rompiendo la racha de dos días de pérdidas durante las primeras horas de negociación europea del miércoles. El repunte del par se ve impulsado por un Dólar estadounidense (USD) más fuerte en general después de que el presidente de EE.UU., Donald Trump, dijera el martes que impondrá aranceles y derechos a los socios comerciales.
El martes por la noche, Trump dijo que su equipo estaba discutiendo aranceles del 25% contra Canadá y México, así como derechos sobre China y la Unión Europea. Trump agregó que las acciones podrían entrar en vigor tan pronto como el 1 de febrero. "Estamos hablando de un arancel del 10% sobre China basado en el hecho de que están enviando fentanilo a México y Canadá", dijo Trump. Los analistas esperan que la administración de Trump pueda desencadenar presiones inflacionarias, lo que podría convencer a la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) de recortar las tasas solo una vez este año, apoyando al USD.
La creciente expectativa de que el Banco Nacional Suizo (SNB) continúe recortando las tasas de interés podría pesar sobre el Franco suizo (CHF) frente al USD. La tasa ya se ha reducido al 0.5% debido a preocupaciones sobre la inflación que permanece por debajo del objetivo del SNB.
Por otro lado, las tensiones geopolíticas en curso entre Rusia y Ucrania podrían impulsar los flujos de refugio seguro, beneficiando al CHF. Ucrania lanzó una ola de drones en Rusia, causando un incendio en un almacenamiento de petróleo y explosiones en una planta que produce aviones militares, dijo el ejército ucraniano el martes. Los inversores también monitorearán los desarrollos en torno al acuerdo de alto el fuego y un acuerdo de liberación de rehenes entre Israel y Hamás.
El Franco suizo (CHF) es la moneda oficial de Suiza. Se encuentra entre las diez monedas más negociadas a nivel mundial, alcanzando volúmenes que superan con creces el tamaño de la economía suiza. Su valor está determinado por el sentimiento general del mercado, la salud económica del país o las medidas adoptadas por el Banco Nacional Suizo (SNB), entre otros factores. Entre 2011 y 2015, el Franco suizo estuvo vinculado al Euro (EUR). La vinculación se eliminó abruptamente, lo que resultó en un aumento de más del 20% en el valor del franco, lo que provocó una turbulencia en los mercados. Aunque la vinculación ya no está en vigor, la suerte del franco suizo tiende a estar altamente correlacionada con la del euro debido a la alta dependencia de la economía suiza de la vecina eurozona.
El Franco suizo (CHF) se considera un activo de refugio seguro, o una moneda que los inversores tienden a comprar en épocas de tensión en los mercados. Esto se debe a la percepción que se tiene de Suiza en el mundo: una economía estable, un sector exportador fuerte, grandes reservas del banco central o una postura política de larga data hacia la neutralidad en los conflictos globales hacen que la moneda del país sea una buena opción para los inversores que huyen de los riesgos. Es probable que los tiempos turbulentos fortalezcan el valor del CHF frente a otras monedas que se consideran más riesgosas para invertir.
El Banco Nacional Suizo (BNS) se reúne cuatro veces al año (una vez cada trimestre, menos que otros bancos centrales importantes) para decidir sobre la política monetaria. El banco aspira a una tasa de inflación anual inferior al 2%. Cuando la inflación supera el objetivo o se prevé que lo superará en el futuro previsible, el banco intentará controlar el crecimiento de los precios elevando su tipo de referencia. Los tipos de interés más altos suelen ser positivos para el Franco suizo (CHF), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, los tipos de interés más bajos tienden a debilitar el CHF.
Los datos macroeconómicos publicados en Suiza son fundamentales para evaluar el estado de la economía y pueden afectar la valoración del Franco suizo (CHF). La economía suiza es estable en términos generales, pero cualquier cambio repentino en el crecimiento económico, la inflación, la cuenta corriente o las reservas de divisas del banco central tienen el potencial de desencadenar movimientos en el CHF. En general, un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y un alto nivel de confianza son buenos para el CHF. Por el contrario, si los datos económicos apuntan a un debilitamiento del impulso, es probable que el CHF se deprecie.
Como economía pequeña y abierta, Suiza depende en gran medida de la salud de las economías vecinas de la Eurozona. La Unión Europea en su conjunto es el principal socio económico de Suiza y un aliado político clave, por lo que la estabilidad de la política macroeconómica y monetaria en la eurozona es esencial para Suiza y, por ende, para el Franco suizo (CHF). Con tal dependencia, algunos modelos sugieren que la correlación entre la suerte del euro (EUR) y el Franco suizo es superior al 90%, o casi perfecta.