La Libra esterlina (GBP) se recupera frente a sus principales pares al inicio de la semana. Las ganancias en la moneda británica se deben en parte a un mayor avance en la demanda de gilts del Reino Unido (UK) debido a los débiles datos de ventas minoristas del Reino Unido para diciembre y a una creciente demanda de activos de riesgo antes de la inauguración del presidente electo de Estados Unidos (US), Donald Trump.
Un fuerte interés comprador por los gilts del Reino Unido ha pesado mucho en los costos de endeudamiento del gobierno, empujando los rendimientos a 30 años aún más bajos, cerca del 5.20% desde su máximo de más de 26 años de 5.47% registrado el 13 de enero. Una inesperada caída en los datos de ventas minoristas del Reino Unido ha acelerado aún más las expectativas moderadas del Banco de Inglaterra (BoE). Las ventas minoristas mensuales se contrajeron un 0.3%, mientras se esperaba que crecieran a un ritmo más rápido del 0.4% desde un incremento del 0.1% en noviembre. Los analistas de Oxford Economics esperan que el BoE recorte las tasas de interés en 100 puntos básicos (bps) hasta el 3.75% para fin de año.
Los rendimientos de los gilt del Reino Unido alcanzaron su punto máximo la semana pasada tras la publicación de datos del Índice de Precios al Consumidor (CPI) más débiles de lo esperado para diciembre, lo que aumentó la especulación de que el BoE recortará sus tasas de endeudamiento en la próxima reunión de política el 6 de febrero.
Vale la pena señalar que el tamaño de la caída en los rendimientos de los gilt del Reino Unido es mayor que la recuperación de la Libra esterlina, ya que los datos débiles del Reino Unido han impulsado las expectativas moderadas del BoE, que son técnicamente negativas para el GBP. Las mayores apuestas por tasas de interés más bajas del BoE son desfavorables para la Libra esterlina. Mientras tanto, los mercados de renta variable del Reino Unido han subido bruscamente en los últimos días de negociación, ya que la Canciller de Hacienda, Rachel Reeves, no se verá obligada a subir impuestos ni a recortar el gasto público para cumplir con su agenda económica.
De cara al futuro, el próximo movimiento de la Libra esterlina estará guiado por los datos de empleo del Reino Unido para los tres meses que terminan en noviembre, que se publicarán el martes.
La Libra esterlina cotiza al alza alrededor de 1.2200 frente al Dólar estadounidense el lunes, pero ha estado en gran medida lateral entre 1.2100 y 1.2300 durante una semana. La perspectiva para el par GBP/USD sigue siendo bajista, ya que la EMA de 50 días se inclina hacia abajo alrededor de 1.2538.
El Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días se mantiene dentro del rango de 20.00-40.00, lo que sugiere un fuerte impulso bajista.
Mirando hacia abajo, se espera que el par encuentre soporte cerca del mínimo de octubre de 2023 de 1.2050. Al alza, el máximo del 15 de enero de 1.2306 actuará como resistencia clave.
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d. C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de cambio de divisas (FX) más comercializada en el mundo, representando el 12% de todas las transacciones, con un promedio de 630 mil millones de $ al día, según datos de 2022. Sus pares comerciales clave son GBP/USD, que representa el 11% de FX, GBP/JPY (3%) y EUR/GBP (2%). La Libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria decidida por el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en si ha logrado su objetivo principal de "estabilidad de precios": una tasa de inflación constante de alrededor del 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intentará controlarla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para las personas y las empresas. Esto es generalmente positivo para la libra esterlina, ya que los tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores globales inviertan su dinero. Cuando la inflación cae demasiado es una señal de que el crecimiento económico se está desacelerando. En este escenario, el Banco de Inglaterra considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas se endeudarán más para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden afectar el valor de la libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Otro dato importante que se publica y afecta a la Libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo