Los mercados se agitaron el miércoles, pero en su mayoría se mantuvieron dentro de rangos estrechos mientras los inversores se preparan para un calendario de publicaciones agitado antes del importante informe de empleos NFP de EE.UU. del viernes.
Esto es lo que necesita saber de cara al jueves 9 de enero:
El Índice del Dólar (DXY) exploró terrenos más altos el miércoles, ya que el tibio sentimiento de los inversores mantuvo un pie firmemente en el Dólar como refugio seguro. Sin embargo, los operadores están demostrando ser reacios a inclinarse demasiado en cualquier dirección, deteniéndose antes de empujar al DXY a nuevos máximos de 26 meses. Una serie de discursos de los responsables de la política monetaria de la Reserva Federal (Fed) esperan a los operadores el jueves, así como los recortes de empleo de Challenger para diciembre, que servirán como el último adelanto de los datos de las nóminas no agrícolas (NFP) antes del informe laboral del viernes.
El EUR/USD está de vuelta probando la zona de 1.0300 después de fallar en una recuperación alcista a corto plazo. El par está a un mal día de tocar el nivel de 1.0200 por primera vez en más de dos años, y los operadores del Euro estarán esperando un giro al alza en las cifras de ventas minoristas de la Eurozona para el año terminado en diciembre, que se publicarán temprano el jueves, pero no antes de que las cifras de producción industrial alemana inicien la sesión de negociación europea.
El GBP/USD probó un nuevo mínimo de nueve meses el miércoles, tocando 1.2320 mientras el lado del calendario económico del Reino Unido sigue siendo escaso y los operadores de Cable luchan por encontrar el botón de compra. Un último empuje bajista hacia el lado bajo verá al GBP/USD cruzar por debajo de 1.3200 y establecer nuevos mínimos de 14 meses.
Los operadores del AUD/USD tienen un calendario de datos complicado con el que lidiar el jueves. Las cifras de ventas minoristas de Australia para noviembre se publicarán temprano en la sesión de Antípodas, y se espera que suban, mientras que se espera que la balanza comercial de Australia se contraiga ligeramente. China seguirá con su propia publicación de datos, lo que podría tener impactos indirectos para el Dólar australiano. Se espera que la inflación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de China para diciembre se enfríe hasta casi plano.
El USD/JPY continúa su camino ascendente mientras el Banco de Japón (BoJ) lucha por encontrar una manera de superar el amplio diferencial de tasas de interés del Yen que no implique aumentar las tasas de interés. El USD/JPY alcanzó máximos de varias décadas el verano pasado, y los esfuerzos del BoJ para intervenir directamente en favor del Yen han resultado ser no solo exorbitantemente caros, sino también temporales. El par ha subido casi un 14% después de alcanzar un fondo técnico cerca de 140.00 en septiembre.
La política monetaria de Estados Unidos está dirigida por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de los precios y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos objetivos es ajustar los tipos de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Reserva Federal, ésta sube los tipos de interés, incrementando los costes de los préstamos en toda la economía. Esto se traduce en un fortalecimiento del Dólar estadounidense (USD), ya que hace de Estados Unidos un lugar más atractivo para que los inversores internacionales coloquen su dinero. Cuando la inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Reserva Federal puede bajar los tipos de interés para fomentar el endeudamiento, lo que pesa sobre el billete verde.
La Reserva Federal (Fed) celebra ocho reuniones al año, en las que el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) evalúa la situación económica y toma decisiones de política monetaria. El FOMC está formado por doce funcionarios de la Reserva Federal: los siete miembros del Consejo de Gobernadores, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York y cuatro de los once presidentes de los bancos regionales de la Reserva, que ejercen sus cargos durante un año de forma rotatoria.
En situaciones extremas, la Reserva Federal puede recurrir a una política denominada Quantitative Easing (QE). El QE es el proceso por el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Es una medida de política no estándar utilizada durante las crisis o cuando la inflación es extremadamente baja. Fue el arma elegida por la Fed durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos de alta calidad de instituciones financieras. El QE suele debilitar al Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso a la QE, por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a instituciones financieras y no reinvierte el capital de los bonos que tiene en cartera que vencen, para comprar nuevos bonos. Suele ser positivo para el valor del Dólar estadounidense.