El Yen japonés (JPY) comienza la nueva semana con una nota más suave y se mantiene a poca distancia de un mínimo de cinco meses tocado frente a su homólogo estadounidense el viernes. Las dudas sobre cuándo el Banco de Japón (BoJ) volverá a subir las tasas de interés resultan ser un factor clave que pesa sobre el JPY. Además, la reciente ampliación del diferencial de rendimiento entre EE.UU. y Japón, impulsada por el giro de línea dura de la Reserva Federal (Fed), socava el JPY de menor rendimiento.
A esto se suma un tono generalmente positivo en torno a los mercados bursátiles, que se percibe como un factor que reduce la demanda del JPY como refugio seguro. Mientras tanto, los sólidos datos de inflación publicados en Japón el viernes dejaron la puerta abierta para una posible subida de tasas del BoJ en enero o marzo. Esto, junto con la moderada evolución del precio del Dólar estadounidense (USD), no logra ayudar al par USD/JPY a capitalizar su repunte en la sesión asiática hacia la zona de 156.70 en ausencia de cualquier catalizador fundamental relevante.
Desde una perspectiva técnica, el mínimo del viernes, alrededor de la zona de 156.00-155.95, parece ahora proteger la caída inmediata. Cualquier descenso adicional podría verse como una oportunidad de compra cerca de la zona horizontal de 155.50. Este próximo soporte relevante está fijado cerca del nivel psicológico de 155.00, que si se rompe decisivamente, podría cambiar el sesgo a corto plazo a favor de los bajistas y hacer que el par USD/JPY sea vulnerable a debilitarse aún más.
En el otro extremo, la cifra redonda de 157.00 parece ahora actuar como un obstáculo inmediato antes de la región de 157.40-157.45 y el pico de varios meses, alrededor de la zona de 157.90 tocada el viernes. Algunas compras de seguimiento más allá del nivel de 158.00 se verán como un nuevo desencadenante para los alcistas en medio de osciladores positivos en el gráfico diario. El par USD/JPY podría entonces subir al obstáculo intermedio de 158.45 antes de apuntar a recuperar el nivel de 159.00.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.