El Peso mexicano (MXN) cotiza con ganancias marginales frente al Dólar estadounidense (USD) el jueves después de caer a mínimos de tres semanas cerca de 20.40 el día anterior. Un recorte de línea dura por parte de la Reserva Federal (Fed) el miércoles, combinado con datos poco inspiradores de México, mantiene al MXN en una posición débil antes de la decisión de política monetaria del Banco de México (Banxico).
Una encuesta de analistas publicada por Citibank reveló una opinión generalizada de que el banco central mexicano seguiría los pasos de la Fed y recortaría las tasas en 25 puntos básicos (pbs). Los analistas subrayan que las menores presiones inflacionarias y una perspectiva económica más suave ejercen presión sobre Banxico para reducir los costos de los préstamos.
La Reserva Federal recortó las tasas de interés como se esperaba, pero su declaración de política monetaria y la conferencia de prensa del presidente Jerome Powell se inclinaron hacia el lado de línea dura. El banco central elevó las expectativas de inflación y crecimiento para el próximo año y señaló un camino de flexibilización más lento.
El USD/MXN ha roto por encima de la parte superior del canal horizontal de las últimas dos semanas en 20.30 y está consolidando ganancias por debajo del área de 20.40, con el máximo del 2 de diciembre en 20.60 a la vista.
Los indicadores técnicos muestran un impulso alcista creciente, con la acción del precio por encima de la media móvil simple (SMA) de 100 en el gráfico de 4 horas y el índice de fuerza relativa (RSI) aún por debajo de los niveles de sobrecompra.
Los niveles de soporte están en la parte superior del canal de las últimas dos semanas en 20.30, antes del nivel clave de 20.00. Al alza, las resistencias están en el mencionado 20.60, antes de los máximos del 6 y 26 de noviembre en 20.80.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.