El Peso mexicano recuperó algo de terreno frente al Dólar estadounidense el miércoles, ya que los participantes del mercado esperan la decisión de política monetaria de la Reserva Federal (Fed). Los datos económicos de México también dieron un respiro a la moneda de mercado emergente, que se mantuvo presionada durante los últimos dos días. El USD/MXN se intercambió a 20.14, con una caída del 0.18%.
El mercado se mantiene lateral antes de la decisión de la Fed. Según los contratos de futuros de tasas de fondos federales, los operadores habían descontado un recorte de tasas de 25 puntos básicos (bps), llevando las tasas a un rango objetivo de 4.25%—4.50%. Sin embargo, los operadores están enfocados en la publicación del gráfico de puntos de la Fed, que los responsables de la política monetaria utilizan para revelar dónde ven las tasas a lo largo del año.
Según una encuesta de Bloomberg a economistas, se proyecta que los funcionarios de la Fed confirmen tres recortes de tasas para 2025 en el gráfico de puntos de diciembre. En septiembre, los responsables de la política monetaria estimaron que la tasa de fondos federales terminaría cerca del 3.4% en 2025.
Después de eso, el presidente de la Fed, Jerome Powell, llevará a cabo su última conferencia de prensa posterior a la política monetaria del año.
Además, la agenda económica de México reveló que el gasto privado aumentó en el tercer trimestre, según el Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI).
El 19 de diciembre, se espera que el Banco de México (Banxico) recorte las tasas de interés en un cuarto de punto porcentual hasta el 10.00%.
Esta semana, la agenda de México incluirá la política monetaria de Banxico. En EE.UU., los inversores también se centrarán en los datos del PIB de EE.UU. del jueves y en el indicador de inflación favorito de la Fed, el índice de precios del gasto en consumo personal (PCE) subyacente, que podría impactar la demanda de lingotes.
El USD/MXN mantiene un sesgo alcista, con el par tocando fondo cerca de la media móvil simple (SMA) de 50 días en 20.11. El momentum es lateral, como lo muestra el índice de fuerza relativa (RSI) casi plano en su línea neutral. Por lo tanto, el par exótico ha encontrado aceptación en el rango de 20.00-20.20, antes del final de 2025.
Para una continuación alcista, los compradores deben superar 20.20 antes de desafiar el nivel psicológico de 20.50. Con una mayor fortaleza, la siguiente resistencia sería el máximo diario del 2 de diciembre de 20.59, seguido del pico anual de 20.82 y la marca de 21.00.
Por el contrario, si el USD/MXN cae por debajo de la media móvil simple (SMA) de 50 días en 20.11, el siguiente soporte sería 20.00. Se prevé una mayor caída en la SMA de 100 días en 19.74, antes de exponer 19.50.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.