El Yen japonés (JPY) se fortalece en todos los ámbitos tras la publicación de las fuertes cifras de inflación al consumidor de noviembre en Tokio, la capital de Japón, lo que respalda el caso de otra subida de tasas del Banco de Japón (BoJ) en diciembre. Además de esto, los riesgos geopolíticos derivados de la guerra entre Rusia y Ucrania, las preocupaciones sobre los planes arancelarios del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, y un ligero deterioro en el sentimiento de riesgo global impulsan los flujos de refugio hacia el JPY.
Mientras tanto, la reciente caída en los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU., que siguió a la nominación de Scott Bessent como secretario del Tesoro de EE.UU., resulta ser otro factor que beneficia al JPY de menor rendimiento. El Dólar estadounidense (USD), por otro lado, se debilita cerca de un mínimo de dos semanas en medio de las expectativas de que la Reserva Federal (Fed) recortará las tasas en diciembre y contribuye a la caída del par USD/JPY por debajo del nivel psicológico de 150.00, o el nivel más bajo desde el 21 de octubre.
Desde una perspectiva técnica, un quiebre intradía por debajo del nivel de retroceso de Fibonacci del 38.2% del rally de septiembre a noviembre y el nivel de 150.00 podría considerarse un desencadenante clave para los operadores bajistas. Además, los osciladores en el gráfico diario han estado ganando tracción negativa y aún están lejos de estar en la zona de sobreventa. Esto, a su vez, respalda las perspectivas de un nuevo movimiento bajista a corto plazo para el par USD/JPY, hacia el próximo soporte relevante cerca de la región de 149.45. La trayectoria descendente podría extenderse aún más hacia el vecindario de 148.00, o el nivel de retroceso del 50%.
Por otro lado, el mínimo mensual anterior, alrededor de la zona de 150.45, ahora parece actuar como un obstáculo inmediato antes del nivel de 152.00. Este último coincide con el punto de ruptura de soporte de la muy importante Media Móvil Simple (SMA) de 200 días y debería actuar como un punto fundamental clave. Una fortaleza sostenida más allá podría desencadenar un rally de cobertura de cortos hacia el obstáculo intermedio de 152.65-152.70 en ruta hacia la cifra redonda de 153.00 y la zona de congestión de 153.30-153.35.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.