El GBP/USD cayó otras cuatro décimas de un por ciento el jueves, alcanzando las ofertas más bajas del par en seis meses, ya que la debilidad subyacente de la Libra esterlina arrastra al par aún más hacia el extremo inferior frente al Dólar estadounidense. Las presiones del mercado se están acumulando antes de las publicaciones clave del viernes que se esperan a ambos lados del Atlántico para cerrar una semana de bajo impacto.
El viernes comenzará con una publicación temprana de las cifras de ventas minoristas del Reino Unido para octubre. Se espera que las ventas minoristas del Reino Unido se contraigan un 0.3% mensual en comparación con el 0.3% de septiembre. En términos anualizados, se prevé que el crecimiento de las ventas minoristas del Reino Unido se reduzca al 3.4% interanual desde el 3.9% anterior.
Las cifras de actividad empresarial del Índice de Gerentes de Compras (PMI) global se publicarán el viernes en un calendario escalonado, con cifras del PMI esperadas a ambos lados del Atlántico. Se espera que los resultados de la encuesta del PMI manufacturero del Reino Unido para noviembre se mantengan estables en 49.9, justo por debajo del nivel de corte de contracción, mientras que se prevé que los números del PMI de servicios del Reino Unido suban a 52.1 desde 52.0.
Las previsiones medianas del mercado para el lado estadounidense del calendario de publicaciones del PMI del viernes apuntan a un aumento general en las expectativas de actividad, con el PMI manufacturero de EE.UU. para noviembre esperado en 48.8 desde 48.5. Se prevé que el componente de servicios del PMI también aumente a 55.3 desde 55.0.
El gráfico diario del GBP/USD revela una narrativa bajista ya que el par continúa su trayectoria descendente, cotizando alrededor de 1.2590. La acción del precio se ha mantenido por debajo de las Medias Móviles Exponenciales (EMAs) de 50 días (azul) y 200 días (negro), confirmando un patrón de cruce de la muerte formado anteriormente, lo que señala un impulso prolongado a la baja. El par está probando una zona de soporte clave cerca de 1.2590, un nivel que coincide con la consolidación previa en mayo. Una ruptura decisiva por debajo de esta región podría abrir la puerta a más pérdidas hacia 1.2500, donde el soporte psicológico podría ofrecer un respiro temporal.
El indicador MACD en la parte inferior subraya el sentimiento bajista, con la línea MACD extendiéndose por debajo de la línea de señal, manteniendo una pendiente descendente. Además, el histograma permanece en territorio negativo, aunque muestra signos menores de disminución del impulso. Esto sugiere una posible consolidación en el corto plazo antes del próximo movimiento decisivo. Por otro lado, para que los alcistas recuperen el control, una recuperación por encima de la EMA de 50 días en 1.2925 sería crítica, con una mayor resistencia vista cerca de 1.3000. Los operadores deben monitorear de cerca los desarrollos alrededor de los niveles de soporte y EMA, ya que podrían determinar la dirección a mediano plazo del par.
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d. C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de cambio de divisas (FX) más comercializada en el mundo, representando el 12% de todas las transacciones, con un promedio de 630 mil millones de $ al día, según datos de 2022. Sus pares comerciales clave son GBP/USD, que representa el 11% de FX, GBP/JPY (3%) y EUR/GBP (2%). La Libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria decidida por el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en si ha logrado su objetivo principal de "estabilidad de precios": una tasa de inflación constante de alrededor del 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intentará controlarla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para las personas y las empresas. Esto es generalmente positivo para la libra esterlina, ya que los tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores globales inviertan su dinero. Cuando la inflación cae demasiado es una señal de que el crecimiento económico se está desacelerando. En este escenario, el Banco de Inglaterra considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas se endeudarán más para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden afectar el valor de la libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Otro dato importante que se publica y afecta a la Libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo