El Peso mexicano recuperó algo de terreno frente al Dólar estadounidense durante la sesión norteamericana, encogiéndose de hombros ante el ajuste de Moody’s sobre la perspectiva crediticia de México y los sólidos datos de ventas minoristas de EE.UU. Al momento de escribir, el USD/MXN cotiza en 20.34, con una caída del 0.24%.
Debido a los recientes cambios constitucionales, Moody’s Ratings cambió la perspectiva crediticia de México de estable a negativa.
"La reforma constitucional corre el riesgo de erosionar los controles y equilibrios del sistema judicial del país, con un posible impacto negativo en la fortaleza económica y fiscal de México", dijo Moody’s en un comunicado el jueves.
Otras agencias de calificación, como Fitch y S&P Global, mantuvieron la solvencia crediticia de México estable. Fitch Ratings asigna a México BBB-, el nivel más bajo por encima del grado especulativo, mientras que S&P Global Ratings lo tiene un nivel más alto.
Mientras tanto, el Ministro de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, presentó el paquete económico 2025 en la Cámara de Diputados. Las proyecciones del paquete sugieren que la economía crecerá entre un 2% y un 3%, y el déficit fiscal será del 3.9% del Producto Interior Bruto (PIB) para 2025.
El Peso ha extendido sus ganancias a tres días a pesar de que el Banco de México (Banxico) decidió reducir los costos de los préstamos al 10.25% como se esperaba, a pesar de reconocer que los riesgos de inflación se inclinan al alza.
Banxico espera que la inflación general termine 2024 en 4.7%, frente al 4.3% de las previsiones anteriores y muy por encima del objetivo del 3%.
Además, las ventas minoristas de EE.UU. de octubre, reveladas por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), superaron las estimaciones. Otros datos revelados por la Reserva Federal (Fed) mostraron que la producción industrial de octubre mejoró pero se mantuvo en territorio de contracción.
Mientras tanto, los funcionarios de la Fed continuaron haciendo noticias. Susan Collins, de la Fed de Boston, reiteró las palabras del presidente de la Fed, Jerome Powell, del jueves sobre que la Fed no necesita apresurarse a recortar tasas. Collins dijo, "No veo una gran urgencia para bajar las tasas, pero quiero preservar una economía saludable".
El sesgo alcista del USD/MXN permanece, aunque el Peso ha ganado algo de terreno. Para una continuación bajista, los vendedores deben empujar el tipo de cambio por debajo de 20.00. En ese caso, los bajistas podrían desafiar la media móvil simple (SMA) de 50 días a 19.74, seguida del nivel psicológico de 19.50.
Por el contrario, si el USD/MXN reanuda su tendencia alcista y los compradores recuperan 20.50, expondrá el pico de la semana actual en 20.69. Una vez superado, el máximo anual de 20.80 emerge como el próximo nivel de resistencia antes de probar 21.00. Una ruptura de este último y el pico del 8 de marzo de 2022 en 21.46 surgiría como la siguiente resistencia.
Los osciladores como el Índice de Fuerza Relativa (RSI) son alcistas, lo que sugiere que se proyecta una mayor subida en el USD/MXN.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.