El cruce EUR/JPY atrae a algunos vendedores alrededor de 162,15 durante la sesión europea del lunes. El tono moderado de los funcionarios del Banco Central Europeo (BCE) sigue pesando sobre el Euro (EUR) frente al Yen Japonés (JPY). Los inversores se centrarán en el discurso de la presidenta del BCE, Christine Lagarde, el martes en busca de nuevos catalizadores.
La creciente especulación de que el BCE podría acelerar su ritmo de flexibilización de la política monetaria podría ejercer cierta presión de venta sobre el EUR. El BCE redujo la tasa de depósito en otros 25 puntos básicos (bps) en su reunión de octubre. La presidenta Christine Lagarde dijo durante la conferencia de prensa que "probablemente" hay más riesgo a la baja que al alza en la previsión de inflación del BCE.
Lagarde añadió que el banco central no se comprometerá a ninguna trayectoria de tasas en particular y analizará todos los datos disponibles entre ahora y diciembre antes de decidir los próximos pasos. El responsable de políticas del BCE, Francois Villeroy de Galhau, dijo el sábado que el crecimiento de los precios al consumidor en la zona euro probablemente estará en el objetivo del 2% del BCE a principios de 2025, según Bloomberg.
Por otro lado, la intervención verbal de las autoridades japonesas apoya al JPY. El viernes, el principal diplomático de divisas de Japón, Atsushi Mimura, declaró que los funcionarios monitorearán los movimientos del mercado de divisas con un alto sentido de urgencia.
No obstante, la incertidumbre sobre el momento y el ritmo de futuras subidas de tasas por parte del Banco de Japón (BoJ) debería limitar el alza del JPY y crear un viento favorable para el EUR/JPY. El responsable de políticas del BoJ, Seiji Adachi, dijo la semana pasada que el banco central japonés debe subir las tasas de interés a un ritmo "muy moderado" y evitar subidas prematuras.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.