El par USD/JPY extiende su alza a alrededor de 149.20 el lunes durante las primeras horas de negociación asiáticas. El Dólar estadounidense (USD) más firme y la incertidumbre sobre la postura del Banco de Japón (BoJ) en cuanto a la política monetaria proporcionan cierto soporte al par.
Las dudas sobre cuán agresivo será el BoJ en la subida de tasas pesan sobre el Yen japonés (JPY) frente al USD. El BoJ terminó con las tasas de interés negativas en marzo y elevó la tasa de referencia a corto plazo al 0,25% en julio. El gobernador del BoJ, Kazuo Ueda, señaló la disposición del banco central para seguir subiendo las tasas de interés si el desarrollo económico y de precios se alinea con su pronóstico. No obstante, la incertidumbre sobre la postura del primer ministro japonés Shigeru Ishiba en cuanto a la política monetaria podría complicar la decisión de aumentar los costos de los préstamos.
Las tensiones geopolíticas en curso en Oriente Medio podrían impulsar la moneda de refugio seguro como el JPY y limitar el alza del par. CNN informó el domingo que al menos cuatro soldados israelíes murieron y más de 60 personas resultaron heridas por un ataque con drones en el centro-norte de Israel y Hezbollah ha reivindicado la responsabilidad del ataque.
Los datos del Índice de Precios de Producción (IPP) de EE.UU. publicados el viernes apuntan a una perspectiva de inflación aún favorable y respaldan las expectativas de un recorte de tasas de la Reserva Federal (Fed) el próximo mes. Sin embargo, la posibilidad de que la Fed no recorte las tasas tanto como se esperaba podría beneficiar al Dólar estadounidense.
Mientras tanto, el Índice del Dólar (DXY), que sigue al USD frente a una cesta de divisas, cotiza cerca del nivel más alto desde mediados de agosto por encima del nivel psicológico de 103.00. Según la herramienta FedWatch del CME, los operadores están valorando aproximadamente un 88,6% de probabilidades de que la Fed recorte la tasa de interés en 25 puntos básicos (pb) en noviembre.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.